Conservar Cebolla Caramelizada

En el mundo de la cocina existe gran variedad y formas para preparar un mismo alimento. Cada producto o ingrediente puede tener un diferente uso y, de igual forma, una distinta preparación.

Para el caso de la cebolla no vendría siendo la excepción dado que existen variados métodos de preparar la cebolla para incluirlas en tus comidas.

Cómo guardar cebolla caramelizada

Un ejemplo muy claro de esto es la cebolla caramelizada, se trata de una forma de preparar la cebolla que agrada a gran cantidad de personas a nivel mundial.

Incluso, en algunos casos, se puede usar para preparar comidas realmente lujosas. Es por esto que muchas personas realizan el proceso de caramelizar las cebollas y poseen siempre un poco en sus hogares.

No obstante, existe un pequeño detalle en este asunto y es su conservación. En pocas ocasiones, las personas realizan la cantidad de cebolla caramelizada exacta.

En su mayoría, esta preparación siempre suele sobrar, algunas veces es mucho y otras veces es poco. Sin embargo, sigue sobrando del proceso de caramelizar la cebolla.

De no saber cómo almacenar y conservar este alimento en su estado, el mismo se dañaría al pasar los pocos días, algo que no resulta nada conveniente.

Cabe destacar que las cebollas caramelizadas no solo se pueden obtener al añadir azúcar, mediante la oxidación de los azucares naturales de la cebolla, las personas pueden obtener un poco de cebolla caramelizada.

Este proceso suele ser tardío, pero puede otorgar muy buenos resultados. Por eso, si te pegas el trabajo de hacer cebolla caramelizada, tal vez te estés preguntando acerca de la conservación de la cebolla caramelizada.

Cómo conservar cebolla caramelizada

Una vez las personas han caramelizado sus cebollas y las mismas han sido usadas para las recetas necesarias, puede llegar a sobrar un poco de este ingrediente y es cuando surge la incógnita de como almacenarla.

Para lograr almacenarla y evitar que la misma se dañe será necesario el seguimiento de estos pasos:

Dejar enfriar la cebolla

Lo primero que será necesario realizar, es esperar a que la cebolla caramelizada se enfrié correctamente.

Se debe ser paciente, ya que este proceso es recomendable que sea de 5 a 6 horas continuas para obtener la temperatura ambiente correcta.

El precipitarse a almacenar la cebolla ya caramelizada resulta muy contradictorio. Esto se debe a que al guardar la cebolla a una temperatura cálida ayuda a los microrganismos en la descomposición.

Los microrganismos podrán realizar su labor de forma tranquila y rápida, lo que da como resultado una cebolla caramelizada de poca duración.

Guardar en un recipiente

Una vez nos aseguramos de que la cebolla caramelizada se encuentra totalmente fría, llega la hora de almacenarla.

Lo ideal para estos casos es guardarla en un bote de cristal, estos envases son ideales por sus superficies lisas.

Por otro lado, si no posees un envase de vidrio puedes usar uno de plástico, aunque la duración se podrá notar reducida en comparación al envase de vidrio.

Los envases plásticos poseen poros en donde los microrganismos pueden entrar y multiplicarse fácilmente.Esta es la razón por la que un envase de vidrio es tu mejor opción.

El uso de una bolsa o papel plásticos delgado

Antes de cerrar el envase, lo mejor que puedes hacer es colocar una delgada capa de plástico entre la tapa y el envase.

La razón para esto es que el plástico en esta zona evita la entrada de aire y se consigue un cierre más hermético.

Al ingresar menos aire se evita la propagación de los microrganismos que descomponen la cebolla.

Cerrar y guardar en la nevera

Una vez que estas totalmente seguro que el envase se encuentra completamente cerrado, es hora de almacenarlo en la nevera.

Con este proceso ya estarás asegurando que tus cebollas caramelizadas logren soportar un tiempo superior.

Duración de la cebolla caramelizada

Se debe tener en cuenta que el azúcar ofrece unas propiedades conservantes, lo que ayuda en gran medida a su conservación.

Al realizar todo este proceso tus cebollas caramelizadas podrán durar de 7 a 10 días en la nevera.

Transcurrido este tiempo es recomendable repetir el proceso de conservación para asegurarse de que no se dañe la cebolla.

Por otro lado, si al volver a hacer el proceso de cocción de la cebolla se observa algún aspecto o textura extraña es recomendable desechar la cebolla caramelizada.